viernes, noviembre 21, 2008

Lavanda en tiempos de crisis

Siempre me ha gustado el olor de la lavanda. En verano, a pie de monte, recogemos racimos de espliego, lo dejamos secar y adornamos con él cualquier rincón de nuestra casa de piedra. Y las habitaciones huelen siempre a flores moradas y salvajes. Mi tía deja también jabones entre la ropa blanca de los armarios, y los dormitorios huelen entonces a jabón, a limpio.
También me gusta el color de la lavanda. Ese azul casi morado, como de cielo de verano por la noche, me trae recuerdos de la hora violeta, de cómo se encendían una a una las farolas en las noches larguísimas de mi niñez.
Me atraen los olores cítricos para despertarme, y la lavanda, el talco, el olor a bebé para relajarme. Por eso me pareció una propuesta muy interesante la de Telva, cuando sugirió un baño aromático a base de aceite de lavanda, de naranja dulce y de bergamota, los tres de Sanaflore. Y supongo que esos mismos aceites esenciales pueden servir también para inventar nuestro propio perfume, mezclando varias gotas en medio litro de agua y medio de alcohol: imagino que a eso se refieren cuando hablan de "base de alcohol en agua".
Una opción mucho más fácil es comprar la colonia Dulces sueños de Johnson´s baby, que no llega a los cuatro euros y huele a lavanda y a talco a la vez. Y, si tienes cerca una perfumería Douglas, esta navidad podrás hacerte con la fragancia Baby de Harayuku Lovers, la línea de Gwen Stefani con el delicioso envase de estética "lolita japo". Creo que saldrán por veinte euros, un precio bastante razonable. Sin embargo, el bote de colonia Johnson´s tiene también su poesía, una lírica escondida de sábados en supermercados y lavanda en tiempos de crisis.

12 comentarios:

Benita Pérez-Pardo dijo...

Me encanta la lavanda pero no me veo haciendo un perfume.

No conozco Sanaflore, ¿dónde está?. Me gustaría poder decir que intentaré hacer un perfume pero me temo que sólo sería capza de generar desorden con un montón de botecitos y me saldría fatal.


Hay muchas colonias de Lavanda. En Álvarez Gómez en Serrano, tienen colonias de todas las flores, ¿las conoces?. De vez en cuando compreo una cuando voy a Madrid. La de jazmín me recuerda a Jávea.

Adaldrida dijo...

Benita, he puesto enlace en la palabra Sanaflore. Es una marca de cosmética bío, y a mí junto con Korres es la que más me gusta (de las "naturales", otras como Dr Hauschka me echan para atrás). Igual que Korres, también, se vende en la parafarmacia del C.I. Tiene aceites esenciales de casi todo, para añadir unas gotas a la bañera, o a una crema corporal y hacerte un masaje, o añadir a tu crema facial si tienes la piel muy seca, el aceite de geranio por ejemplo es muy bueno.
También tienen otras cosas, uno de sus best sellers es el Acqua Melissae, un agua calmante e hidratante (como los tónicos o aguas thermales) pero que además es antiarrugas, debe ser por la melisa. Y han sacado precisamente un agua de lavanda que es astringente para pieles mixtas.

A mí me gusta el agua de Álvarez Gómez de toda la vida y la de niños mmmm..., pero las otras de jazmín, de lilas... me parecen muy fuertes, es que a mí los perfumes florales no me gustan, la lavanda es una excepción, y es así porque tiene un toque de talco... esa colonia de Johnson´s es una maravilla.

Benita Pérez-Pardo dijo...

Rocío, si está en el C.I. entonces es más fácil. Tengo pendiente probar las de Carla Royo...

Un abrazo

Atiza dijo...

Fantástico el gloss de Sephora. Una máscara de pestañas de ahí, plese.

Verónica Frágola dijo...

que buena idea lo de la colonia de johnsons, a mi tambien me encanta el olor a lavanda!
otro aroma que me hace soñar es el olor a violetas.
Saludos!!!!

Anónimo dijo...

Dios, la crema de ducha de lavanda de Weleda... Es lo mejor del mundo antes de irte a dormir!!! No dejes de probarla.

Anónimo dijo...

Hola,
Con las multas a los comerciantes en el barrio de Sans en Barcelona por los organismos de la ‘normalización’ de la Generalitat ha surgido este vídeo, es una tragicomedia digna de verse.

Os recomiendo la visión de CASABLANCA de LLOBREGAT, dedicado especialmente a los que apoyan el CAC (centro de multas por rotular en castellano y cerrar emisoras por criticar las políticas del tripartit) y en especialmente a los que están por todo lo contrario.

CASABLANCA de LLOBREGAT vídeo:

http://www.youtube.com/watch?v=mEQShmIO2vI

(Unir en una línea si sale el enlace cortado).o buscar por google o youtube

Es genial. Gracias por verlo y también por su difusión

Ara dijo...

¡Que rico suena! Es genial poder disfrutar del campo en estado puro, y los espliegos es que huelen de vicio.
Tienes que probar la linea de Lóccitane de lavanda, pa´morirse. Tengo en casa un jabón de manos, y la crema relajante para los pies. Pero la linea tiene desde sales de baño a la leche corporal. Fantástica.
Apunto la colonia de Jonson´s.

Adaldrida dijo...

Atiza, el rimmel se me resiste. Es mi asignatura pendiente y por eso no lo uso casi nunca: se me apelmaza y cae en el párpado inferior provocando el "efecto ojera", un horror...
Pero he oido que hay una máscara de la misma marca Sephora que se llama "plumper" y es buena, cuesta sobre los quince euros que está bien y la hay en versión waterproof.
La que yo uso muuuy de vez en cuando me la regalaron por navidad y es de Bourjois, la Ultra Black, creo que está por los doce euros y deja unas pestañas bonitas.
Aunque dicen que las mejores máscaras son las de Lancôme, del mismo modo que las mejores sombras de ojos son las de mac (puedo asegurarlo), los mejores coloretes, los de Nars (puedo asegurarlo también), y los mejores fondos de maquillaje y correctores, los de Laura Mercier (esto aún no puedo asegurarlo, desgraciadamente...)
En Rimmel me gasto más bien poco, porque sé que no me va a gustar ninguno. Probaré el Plumper de Sephora en su versión Waterproof...

Anónimo dijo...

Rocía, por 15 euros mejor píllate la Zoomlash de MAC. Se queda todo el día en su sitio, curva, deja las pestañas bastante decentes y se desmaquilla muy bien.

Adaldrida dijo...

Ya has oído, Atiza: La zoomlash de Mac.

Atiza dijo...

Gracias, reinas; la ley de la gravedad empieza a hacer estragos y lo que hasta hace nada para mí era tabú, ahora incluso me divierte y me relaja; ésto último porque me ayuda a ejercitar la vista y la cabeza que aparto volando del ordenador, del trabajo y de alguna cosilla más.