sábado, marzo 03, 2007

Oh Jeremy...



Me tienen cautivada las películas de época, quizás porque se suelen basar en los libros que más me gustan. Estas pelis se cuentan entre mis preferidas, y sus actores se cuentan también entre mis preferidos, por qué será...
Sentido y sensibilidad y Mucho ruido y pocas nueces, con la deliciosa Emma Tompson invadiéndolo todo. Emma, con el atracativo Jeremy Northam, "my Mr. Knightley". Northam no se prodiga por los saraos internacionales porque es actor de teatro en Inglaterra. Un hurra por él. Lo vi en El caso Winslow, en Enigma y en el breve papel que hizo en Amistad, de Spielberg. Arrollador, pero nada supera al Mr. Knightley que me volvió loca en Emma. Debo anotar que ya me fascinaba el personaje en la novela, tan íntegro y caballero, afable y serio a la vez... Pero es que verlo en el cine fue como una revelación de lo ya revelado. Nada que ver con el Aragorn pálido y desleído de Viggo Mortensen.
Pero sigo con mis películas inolvidables. Onegin, (peliculón), Miss Potter (la recomendada del mes), Orgullo y prejuicio... Ay, esa mirada de McFadyen... mi mundo por una mirada así, ya rezo yo todas las noches, Dios mío, no quiero despedirme de esta vida terrenal sin que me hayan mirado como Darcy miró a Eliza antes de pedirla en matrimonio a su padre. A ver si me hace caso. A good woman ( la Hunt está insuperable), y La importancia de llamarse Ernesto, donde Colin Firth... ¿alguien tiene un cleenex?
No tengo yo la culpa si Northam y Colin Firth son mis hombres, y Di Caprio, Brad Pitt y Orli me dejan fría... Las quinceañeras me miran con cara de "¡volada en el horizonte!", y las treintañeras me preguntan cómo es que no me derriderriderrito con George Clooney... Menos mal que con alguna de mis tías más sensatas comparto mi desmedido amor por John Wayne.

6 comentarios:

Rictus Morte dijo...

No me derrito yo por ninguno, pero "La importancia de llamarse Ernesto" es una buena película. La traducción del título de la novela de Oscar Wilde deja un poco que desear porque en inglés juega con las palabras Ernest y Earnest -serio-. ¿Qué tal Rupert Everet?

No he visto la película Oneguin, pero me leí el libro del poema Eugenio Oneguin de Pushkin, y desde entonces es uno de mis poetas favoritos.

un saludo

Jesús Sanz Rioja dijo...

A mí me pasa algo parecido, y es que me derrito mucho más por Lauren Bacall que por las diversas jolies que pueblan la pantalla (salvo, quizá, la Pfeiffer o la Thurman).

Anónimo dijo...

Por Lauren Bacall me derrito hasta yo, que soy mujer... Mi madre dice que es fría, pero ya,ya. Así de fría querría ser yo. Qué elegancia, Dios mío...

Anónimo dijo...

Mis actores prefes: Brendan Fraser (hummmm), Orlando Bloom... sí, ya sé que está de moda, pero me gusta, :(. Carmelo Gómez y David Duchovny, no sé si se escribe así.

Anónimo dijo...

No tienes mal gusto, Coco. Brendan Frser me gusta mucho en Desde el cielo con amor, típica americanada con happy end que a mí me encanta. El personaje es encantador. Carmelo Gomez en El perro del hortelano, se me ha pasado poner esa peli en el post. Esos ojos oscuros... ¡qué interesante! Y Duchovny en Expediente X va de amargao, pero en Hechizo del corazón (soy adicta a la comedia amable, qué horror Dios mío), pues está muy bien...
Orli es un horror. Una niña, pero vamos, sólo es una opinión. De todo esto saco dos cosas.
1) que me gustan los chicos de ojos oscuros y
2) que me enamoran más los personajes que los actores. Eso es un peligro...
Vaya ladrillos que lanzo.

Anónimo dijo...

Pues a mí me gusta Orli. Ir en contra de los chicos guapos sólo porque están de moda es una tontería. Ahora, mi novio es mejor que Orli. ¡Viva yo!