Hoy se celebra en Haro la Virgen de la Vega. La Iglesia de la Vega está al fondo de la calle de la Vega, donde mis bisabuelos compraron un pisito. Allí vamos en verano lo menos un par de días, y desde el verano pasado una semana completa. Paralelos a la calle de la Vega están los jardines de la Vega, que son como la celebración plástica de las bodas de Caná, con columpios, mazos de flores, orquestina los domingos y fila de plátanos. La fila de plátanos es lo que se ve desde la terraza de nuestro piso, así que parece que estamos clavados en un bosque, que sirve de telón en plan locus amoenus a nuestras partidas de cartas, lecturas de libros y siestas en mecedora.
Mi abuela siempre va a Haro por la Virgen, pero como este año nos vamos a Canarias a conocer nuestros ancestros, tendrá que conformarse. Yo también me voy a Canarias, lo aviso, por una semana. Esta es la vida: en el momento en que comenzaba a estar un poco lúcida, tengo que despedirme de nuevo. Hasta pronto.
2 comentarios:
¿A Canarias a conocer tus ancestros? Mi yo cotilla y mi yo historiador (acaso el mismo yo) demandan más datos, más madera... ¡Que lo pases bien por aquí! Ya nos contarás.
Mis ancestros eran holandeses, por eso mi abuela no tiene arrugas y yo tengo la piel sensible y bastante bonita. En el s.XVII emigraron a la isla de la Palma, en Canarias. Ya te contaré...
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