lunes, enero 09, 2012

El Primer Regalo de Reyes

Porque un libro es un regalo...

Este año, los Reyes Magos hicieron su entrada en mi vida el cinco de enero, y no en el salón de mi casa familiar sino en una librería que, por supuesto, era la librería Castroviejo. Repleta de música clásica, madera y sol.

Entré por casualidad, después de ver a Sus Majestades bajando del helicóptero amarillo en las Gaunas. Así es La Rioja: un campo de fútbol repleto de niños agitando pañuelos, villancicos tronando por megafonía y el alcalde (hoy alcaldesa) recibiendo la embajada real. Siempre se me eriza la piel, mitad por el frío mitad por la magia. Vuelvo a creer.

Pero los Reyes magos a veces se despistan, olvidan un último regalo y tengo que acercarme a mi rincón favorito para comprar la novela Grandes esperanzas de Dickens. Y, de paso, Lo que ha llovido de Enrique García-Máiquez.
El mejor librero del mundo envuelve sus libros cuidadosamente. Se detiene. Me mira. Y musita: "espera un momento..." Con el corazón en vilo y cantando, espero.
Y regresa con un librito de los años setenta, de uno de mis poetas más queridos ¿Lo tienes? No, no lo tengo, y es uno de los pocos que me faltan.

El librero es Gaspar. Me ha engañado. Y, con una sencillez regia, me tiende el precioso cuadernillo diciendo: "pues para ti".

6 comentarios:

Pilar dijo...

Pues que buenr egalo, en los libros siempre encontramos compañía así que son el mejor regalo del mundo!

Un besito

María dijo...

Quiero comentar en el blog de maquillaje y no puedo

Adaldrida dijo...

Ahora sí puedes, María...
Por la noche impongo la ausencia de anónimos porque me he dado cuenta de que los trolls son nocturnos.

Ana dijo...

leí grandes esperanzas hace poco, es un libro rarísimo pero muy chulo :)que disfrutes mucho tus regalos de Reyes!!!

Javier dijo...

Pues el libro que está debajo, es muy, pero muy recomendable ( bueno, yo se lo recomiendo) Es el segundo tomo de las obras completas de Cunqueiro. Está ahí lo que más me gusta de Cunqueiro, la Escuela de curanderos y La otra gente, aunque todo es muy bueno.

Adaldrida dijo...

Claro que sí, Javier... como que se lo pedí yo misma a los Reyes. Me apetece muuuucho...