Me sentaron en una silla alta, muy alta, como de estudios cinematográficos. Frente al espejo encendido la chica me preguntó que cómo quería el maquillaje, si sofisticado o natural. Lo quiero natural, le dije, pero con ojos ahumados, si puede ser en azul. Nos reímos ambas ante mi paradoja.
En la mesita iba colocando, uno a uno, los botecitos que iba a usar conmigo, como en un ritual, mientras bisbiseaba. Esto, lo otro... Quiero probar el Prep + Prime con factor cincuenta, sugerí. Ya, ya pensaba ponértelo.
El curso es individual, durante una hora dispones de una maquilladora solita para ti. Ella te pinta media cara impartiendo consejos y tú debes pintarte la otra mitad emulando su depurada técnica. Es agotador, divertido y fascinante.
Todo comenzó con el contorno de ojos. El de Mac tiene cafeína (ingrediente de moda en el cuidado de la piel), y promete un efecto flash que cumple con creces. Tras una crema hidratante sin aceite, aplicó el deseado Prep + Prime con pincel. Se trata de un primer, es decir, un producto que prepara el lienzo para trabajar en él, matiza brillos, rojeces y líneas de expresión. Aún no me he vuelto tan pija como para que estos cantos de sirena me tienten, pero es que este preparador de Mac es a la vez un protector solar muy alto, de textura translúcida y ligera, que no deja la cara blanquecina. Es el milagro que yo necesitaba.
¿Qué he aprendido en esta lección magistral? A utilizar los pinceles: trazos cortos y precisos en el corrector, suaves y largos en la base. A aplicar menos cantidad de la que yo solía usar. A elegir los colores adecuados para borrar ojeras.
Yo no padezco de este mal, afortunadamente, pero para que mi reportaje fuera completo, le pregunté. Me dijo que para ojeras azuladas van bien los pigmentos amarillos, pero que si el tono del párpado inferior es más bien gris, se necesita un corrector naranja. Sí, naranja. Ya se lo había oído a Flopsy, una maquilladora del foro Vogue. Pude confirmar una vieja idea mía: está prohibido poner corrector verde en la cara. Siempre queda raro. Las rojeces se neutralizan con pigmentos amarillos.
En mis ojos mezcló dos sombras que ya tengo, porque me encantan, así que me enseñó a sacar partido a mis propias pinturas. Difuminando un azul eléctrico en la esquina externa y un gris plata en todo el párpado móvil y trazando con la mítica Carbón una raya a ras de pestañas consiguió el look smokey blue que yo estaba buscando. Ella bajaba los ojos para trabajar y yo debía mantenerlos abiertos: nos mirábamos. Llevas puesta la Satin Taupe, ¿verdad? ¿Cómo lo sabes? Bajé la vista como una colegiala: es mi sombra preferida, la primera que compré. Aquellas navidades en Madrid...
También he aprendido algo en el manejo del colorete. Con la brocha en diagonal, comenzando casi en la oreja y difuminando mucho, logró que pareciera que el rubor me nacía bajo la piel. Usó un colorete precioso, el Dame: rosa apagado y muy favorecedor.
Mientras volvía a casa en autobús me sentía cómoda, no disfrazada. Y la luz entraba a raudales. Y nadie se quedó mirándome, porque no era para tanto, pero un chico me sonrió. Era lo que yo quería.
Deberías haber pegado una foto tuya para que pudieramos ver la obra de arte que te hicieron.
ResponderEliminarAyer dejé sin leer tu entrada; hoy, con tiempo, la he leído y me ha gustado mucho, aunque lo del maquillaje sigue pareciéndome como los manuales de instrucciones de los DVD. Pero ahí está tu magia.
ResponderEliminarY un final antológico.
Oye Adldrd, porque con un pelín de cóctel vitamínico de la tal Yébenes, alguna infiltración de esas que están tan de moda, ¿no sería el efecto perfecto sin tanta plastaza encimaaaa? Es que yo lo del maquillaje lo tengo chungo porque no me dejan tunearme, hija, y no están los tiempos.
ResponderEliminar¡Qué bien explicado! Casi parece que estuviera yo detrás tuyo mirando...
ResponderEliminarNunca he ido a un curso de los de MAC (a que me maquillaran si, pero a los cursos no).
Un beso!
Dulci: no hice fotos, pero creo que no las pondría: ¡me da corte!
ResponderEliminarARP, gracias. Atiza: ¡no tiene nada que ver! Es necesario cuidarse la cara, pero para jugar con colores hay que maquillarse. Y aquello se parecía atodo menos a una plasta: las capas de primer y corrector son casi invisibles; la de maquillaje, muy fina, ¡y le dije que no quería polvos! Yo creo que son los polvos los que le dan apariencia pesada al maquillaje: hay que buscarse una base mate, no muy gruesa pero sí de larga duración, y voilà!
Paopao, viniendo de una experta como tú, ¡qué elogio! Muchas gracias.
Como si te viera...Entiendo por lo que leo que es totalmente recomendable, vamos un buen auto-regalo o para alguien especial... Además, por aquello de la crisis, el dinero era reembolsable en productos o lo he soñado?
ResponderEliminarBeso,
Carmen
La foto hubiera estado genial!!. Aquí seguimos sin Mac pero la próxima vez que vaya a Madrid te preguntaré primero algo que toque reponer...
ResponderEliminarDe MAC no tengo ni muestras!.
Qué bien!!! Ya tengo quien me enseñe a mí los truquitos de maquillaje. Eso.....tú aprende...tú aprende, que las demás vamos cogiendo apuntes.
ResponderEliminarUn besito, Rocío.
Benita: De Mac, en Fuencarral, no puedes irte sin:
ResponderEliminarUna paleta de cuatro sombras. Te recomiendo mis cuatro preferidas: Knight divine para hacer ahumados suaves, Satin taupe para ahumados en marrón, Honey lust para iluminar (es dorada light-melocotón), y deep truth para noches locas o si tienes un traje azul Klein. Las tres primeras son básicas, la última, el toque excéntrico. Una paleta así es una inversión, porque las sombras de Mac duran aaaaaños.
También te aconsejo dos pigmentos: Old gold y Platinium. Son los colores de la temporada y son preciosísimos.
De coloretes de Mac sólo te recomiendo dos: el Sprinsheen (rosa melocotón con brillitos dorados, superfavorecedor) y el Dame, un rosa sucio apagado que queda bien con labios rojos, rosas, ciruelas o incluso nudes. Es como un comodín.
Labiales: el Jist. Melocotón tostado, muy natural y chic, es mi preferido. Si te atreves con los rojos, el mejor del mundo mundial es el Ramblas red, y en mate el Russian red pero ése es para atrevidas tipo Gwen Stefani o Dita Von Teese.
Y ahora viene toda una colección de barras de labios, la Cremesheen, que me gusta toooda.
Y estamos en crisis, ay. Carmen, es verdad, lo puedes canjear por productos. Yo me llevé el Prep + Prime, que le voy a sacar partidazo, y el perfilador Cherry, que para labios rojos es genial.
Esta Yesteeeee!!! ¡Oé oé oééé!
ResponderEliminarMe encanta leerte, es como si lo viviera por ti.
ResponderEliminarHace un montón, fui para que me maquillaran para una boda y me dejaron genial, no se que hicieron pero el pintalabios no se fue en tooooda la tarde. Habrá que volver para ver cual era :-)
Un besito.
Parece mentira que con todo lo que presume "la doctora filóloga" en conocimientos sobre cosmética,en especial el maquillaje,emplee vocablos tales como "pintar","pinturitas".
ResponderEliminarQuerida,es maquillar y maquillaje,no pintar;¿o es que te consideras un lienzo?.Ah!y para tu información,las rojeces se corrigen con un verde,los morados con un amarillo y los azules con un naranja,no es capricho mío,responden a los colores complementarios.
Pues a mí me encanta la palabra Pintalabios, a lo mejor no está en el DRAE pero toda la vida se ha llamado así, en nuestra adolescencia, y se ha dicho voy a pintarme, y cariñosamente "las pinturas de guerra"...
ResponderEliminarHas dado en la diana, porque es justamente lo que yo pienso del maquillaje y la razón por la que me entusiasma, que es arte y puedes utilizar tu cara como un lienzo. Lo digo muchas veces porque lo pienso así.
Lo del corrector verde no lo digo yo tampoco, fue la maquilladora de Mac, y sobre eso hay varias opiniones así que... ¡libertad! Muchos maquilladores creen que queda raro. Yo no soy profesional, sólo aficionada, y si presumo de algo es de pasármelo pipa. Pásate por el foro Mac y verás cómo pregunto todo lo que no sé, que es mucho.
Pero de filóloga y doctora, no tengo que presumir, es sólo que tengo el título.
Rocio me encantan tus post cuando hablas de pinturas y pinturitas, pintalabios o pintamonas, que al final se trata de divertirse y disfrutar con lo que haces, se llame pintar, maquillar o tunear, ya sean lápices, kolh, fluidlines, o como si son ceras, mientras pinten...
ResponderEliminarUn besito!
No entiendo el tono irónico y agresivo del anónimo, la verdad. Adaldrida (o Rocío Arana, no la conozco aunque algo la he leído), no es agresiva en las entradas. Me parece un poco tontería el comentario, la verdad.
ResponderEliminarPues yo aprendo un montón de las cosas que nos cuentas. Lo mismo de maquillaje que de poesía. Animo, Ro, que eres la mejor. Guapa.
ResponderEliminarRocío,
ResponderEliminaracabo de leer "Campo de pomelos" en Poesía Digital y te busqué por la red para decirte que me había emocionado mucho.
s. c.
Gracias, Jenny. Es lo mejor que podías decirme.
ResponderEliminarY gracias también a Koizumi y Dulcinea. A ninguna de las dos os he visto nunca y, sin embargo, cómo nos divertimos leyéndonos.
Knox, tú eres nuevo, nuevo. Bienvenido.
Anónimo, según la Real Academia de la Lengua Española la palabra pintar tiene muchas acepciones, entre ellas la que en el diccionario consta en el número 18 "Darse colores en el rostro, maquillarse".Te diría muchas cosas anónimo, pero según Cicerón,después de la palabra lo mas elocuente es el silencio, así que pasaré de ti y tu ignorancia y felicitaré directamente a Rocío: me encanta tu blog, he seguido tus consejos en maquillaje y desde que uso los productos que recomiendas he recibido mas de un piropo. Sabes muchísimo y te lo curras a base de bien. Sigue porque gracias a ti cada día somos mas guapas y mas felices.
ResponderEliminarpreciosa reflexion...
ResponderEliminaryo también soy una enamorada del maquillaje .En MAC he encontrado al antiguo infalible 130 ya retirado, que me encantaba. dices que sus primers son buenas?y sus cremas??probaré...