Hoy es un gran día, al menos para mí. Aún no sé crear enlaces, pero si supiera, enlazaría el mismo punto de Camino al que nos guía Enrique hoy, (con unos simples puntos suspensivos, hay que ser grande...)
Sí, ese que dice que es cosa nuestra coonvertir en endecasílabo la prosa de cada día. Muy acertado para este nuevo género que está naciendo, a caballo entre el apunte diarístico y la prosa poética, el genial B. dixit.
Si supiera hacerlo, lo haría, y pondría mi foto en el perfil, y una lista de blogs recomendados, ay... Esto me recuerda a una escena de Por quién doblan la campanas, cuando Ingrid Bergam le dice al chico que le quiere tanto, tanto, que de buena gana le daría un beso.
- Te daría un beso si supiera, pero nunca he sabido... ¿Dónde se esconde la nariz?
A mí, de pequeña, la duda me parecía muy razonable.
Vuelve la fiebre, Ro, sobre todo por las entradas de los últimos días...
ResponderEliminarBienvenida la fiebre bloggera, bienvenido a casa, Fernando...
ResponderEliminarEstá claro que San Josemaría hablaba de endecasílabos en sentido figurado, pero ahí está la gracia, en volver a leer el punto a la luz de tu vocación de poeta... para mí el endecasílabo es el verso más bello y grandioso, el que mejor suena...
ResponderEliminar"La gracia del sentido literal",
ResponderEliminarAlgo que no deberíamos olvidar cuando leemos cualquier texto, por mucho que sepamos que hay otros sentidos (pero están en éste).